No fue una victoria fácil para los de Rijkaard que tuvieron que sudar de los lindo para imponerse en un estadio en el que no perdían desde la temporada 2000-01. Las palabras de Samuel Eto'o de los días anteriores se cumplieron y los azulgranas consiguieron una victoria sin brillo, y para muchos inmerecida, pero que es vital de cara a las aspiraciones de luchar el titulo liguero hasta el final.
Todas las miradas estaban puestas en como iba a reaccionar el F.C. Barcelona después de los malos resultados en sus dos últimos encuentros, pero lejos de salir a por todas el conjunto de Rijkaard salió bastante relajado y con poca mordiente en la zona de ataque. De hecho las primeras oportunidades del partido fueron para el Mallorca, Güiza tuvo la más clara, el jerezano recortó a Milito tras pase de Ibagaza y disparo cruzado. Fuera por milímetros. La mejor oportunidad para el Barça la tuvo Andrés Iniesta que también disparo demasiado cruzado.
Buenas noticias y cambios acertados
Tras la reanudación, Güiza no pudo continuar y, ante el mal partido de Arango, dejaba sólo a Jonas. Además Rijkaard daba entrada a Bojan por Gudjohnsen, consciente de la falta de movilidad en la parte de arriba. Antes de poder apreciar algun cambio en el juego azulgrana Márquez aprovechaba un servicio desde la esquina de Xavi para establecer el 0-1. Gol balsámico.
Con el resultado a favor, Rijkaard metía en el campo a Henry que dispuso de un par de intervenciones brillantes y por momentos recordó al que maravilló en el Arsenal.
Pasaban ya los noventa minutos, cuando apareció Bojan para hacer una magnífica jugada por la banda izquierda, caño incluido, tocar para Henry y que el '14' viera a Eto'o para que el camerunés se sacara un duro disparo desde veinticinco metros ante el que Lux nada pudo hacer. 0-2 resultado final. El Barça volvía a ganar fuera de casa.
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